A pesar de todo, tengo que seguir caminando y he decidido abrir camino incluso donde no lo haya así que me armaré con la hoz para limpiar de ramas el frondoso bosque que me encuentro y me abriré paso por donde quiera y pueda. Lo demás es cuestión de aguante y mis piernas están preparadas.
¡Pues menudas piernas tengo!
2 comentarios:
Ah si?????
Por favor Fisiólogus, non nos dea datos que non sexan empíricamente comprobables.
:P
Lo raro es vivir.
Lo malo es quedarse quieto.
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