Encontré el sitio hace tres años: había una puerta y tras ella el suelo de parqué que pisar soñé. El parqué se ha ido llenando de sillas, mesas, alfombras, espejos, lámparas... y yo. Solo yo. Y Él, de vez en cuando viene Él también. Nadie más.
Es suficiente, sí. Pero no pasaría nada si alguien viniera de visita de vez en cuando...
...tres años después, no hay visitas...
2 comentarios:
O suficiente nunca é abondo.
no es mucho, no, X; no sé si será ambición, ansia...
Publicar un comentario