31 octubre 2005

no es Carlos

Al final no ha sido niño ni se llamará Carlos. Quien tiene boca se equivoca. Pero también es verdad que era por apostar. El juego estaba servido y todo el mundo ha jugado.

30 octubre 2005

algo que contar

Si suena el teléfono y alguien te pregunta por un buen lubricante, es evidente que quiere contarte algo más. Si alguien con quien no has quedado te dice que no puede verte tal día, es que quiere contarte algo más. Si alguien elije un gran escote el día que lleva un morado en el cuello, es probable que no quiera contar nada pero seguro que quiere que se sepa.
Tengo una amiga a la que le encanta dar a conocer el precio de las cosas con que decora su casa, la firma que las diseñó y el exclusivo lugar donde lo compró. No lo suelta a bocajarro pero ya es conocido su exhibicionismo y se sabe cuando va a hacerlo; basta con ver algo nuevo en su casa.
Por segunda o tercera vez -no recuerdo bien- paseo por el exhibicionismo ajeno en la red y recorro algunas bitácoras -soy un gran mirón, un cotilla, y sé que, aunque lo confiese, no es menor el vicio- en las que encuentro bestias ansiosas de ser vistas, miradas, observadas, admiradas...
Por un lado me avergüenza mostrarme así aquí -por eso no me muestro tanto- pero me alegro de no ser tan observado como pretenden otras bestias del territorio bitácorino.
Pero lo paso bien en algunas bitácoras: algunas no muestran las visceras de las bestias, sólo muestran algunos destellos de una de ellas. Esas bitácoras me han gustado.

27 octubre 2005

neopavo

El pavo es la gran bestia con pluma. Más grande es el avestruz y tendrá más pluma pero no se pavonea. El pavo luce sus plumas con ostentación. Las luce durante la época de celo y lo hace para conquistar a la hembra. Para su crianza no se ha de descartar la posibilidad de que un macho puede llegar a tener hasta tres hembras incluso, lo dicen los que saben, que no los que entienden.Pero nuestro pavo no es un pavo cristatus ni miticus, ni un pavo azul o blanco, ni el pavo real arlequin, nuestro pavo es el neopavo y no puede conformarse con la convivencia entre tres hembras; nuestro pavo ni siquiera admite la convivencia.
El neopavo extiende sus alas en cualquier ocasión, ante cualquier bestia, sin importarle edad, género o condición, ni siquiera orientación aunque luego tenga que torcer y cambiarla -no siempre puede hacerlo- y no le importa tampoco el estado de su presa, sería capaz de levantarle a otro pavo su nido.
El neopavo cuida sus alas con esmero y las luce en todo momento, siempre está en celo. Y le gusta y admira a otras bestias que cuidan de su pelaje, pero siempre piensa que su plumaje es el mejor y el que más lucimiento exhibe. Se preocupa además de algunas bestias en el cuidado de su pelaje y plumaje. Pero no permitirá que lo superen y si ocurre será difícil que lo admita.
Al neopavo le gusta pavonearse también verbalmente y por eso aparece en este neobestiario ahora. En los últimos días algunas bestias de la especie han rondado y exhibido pluma alrededor, pero el pavoneo verbal tiene poco futuro alrededor de fisiologus aunque me guste el plumaje del neopavo de manera bestial.
El neopavo sufre al final y lamenta su condición y su estado: no puede convivir y busca la convivencia; se lamenta de ello pero no se resiste a mostrar su cola en cualquier ocasión, y la muestra tanto que a veces se equivoca, pero al neopavo no le importa recoger cola y buscar otra bestia a quien mostrarla; el neopavo reclama lo que no ofrece, por eso también sufre.

22 octubre 2005

bestiario de peluquería

Mi peluquero también tiene hecho su propio bestiario, el bestiario del gremio de los peluqueros. Los tiene clasificados a todos y en su clasificación descubro que lo hace en primer lugar por géneros -no es lo mismo un peluquero que una peluquera- y luego por especialidades -no es lo mismo un peluquero de señoras que uno de caballeros o uno unisex-, dando cabida a todos y cada uno de sus compañeros de profesión.
Comienza hablandome de peluqueras y entre ellas de la peluquera "Angelita", peluquera de toda la vida o recuperada recientemente por la profesión después de un divorcio o antes de él -su marido no soportó que ella ganase más- y con una peluquería instalada en el barrio para atender las necesidades de sus vecinas. Tiene a dos empleadas a lo sumo, sólo una de ellas con contratobasura, la otra sin contrato. Ha descubierto que las ferias de peluquería son un buen escaparate para ella y un buen sitio para socializar y divertirse. Luego esta la peluquera loba, esta tiene más contratadas, pero todas más feas que ella, y si no lo son, ella misma se encarga de que lo sientan así. Van a las ferias a lucir el mayor escote posible y posiblemente a ligar.
Entre los hombre, encuentra mi peluquero al peluquero de Matías Prats, con peluquín, con traje, forrado de pasta que tiene ahorrada de cuando la profesión daba dinero -mi peluquero siempre se queja de ganar poco- y cerrado a novedades, pero que va a la feria porque se divierte, quizás ligando. Lego esta el peluquero moderno, que se pasa de moderno en la mayoría de los casos.
Mi peluquero es muy moderno, pero él se incluye en la categoria de los peluqueros parejita - su socia es también su mujer- y parece ser que en su bestiario serían los peluqueros estándar.
Me he reído un montón reconociendo tipos y bestias del mundo de la peluquería y cuando creía que faltaba uno, ha saltado entre los peluqueros masculinos, pero con mucha presencia en el apartado de las peluqerías unisex: el peluquero gay. Alguno que pasa desapercibido, otros que son locas emplumadas, y finalmente me sorprendo con mi peluquero creando un nuevo bestiario dentro del bestiario de peluqueros: los peluqueros gays. Toda una enorme clasificación paralela.
Todo un descubrimiento.

20 octubre 2005

bestia interior

Continúo pensando en quienes somos; y continúo pensando que somos a veces quienes queremos ser, otras veces quienes quieren los demás, y muy pocas veces quienes somos en realidad.
Nos cuesta mostrar cómo somos. Escondemos lo que nos parece para parecer otros: usamos ropa que disimula nuestros defectos del exterior y, de la misma manera, escogemos entre nuestras artes para esconder los defectos del interior. Parece más fácil esconder estos por estar dentro pero muchas veces se dejan ver de un modo u otro. Mentimos y, como reza el dicho, se pilla antes a un mentiroso que a un cojo.
No sé si conociendo estas miserias merecen estas bestias mentirosas ser reconsideradas por el resto de las bestias. No sé si debo conceder que alguna vez he podido mentir de la misma manera; no sé si habré escondido igualmente mis defectos interiores; no quiero saber tampoco si me lo han perdonado alguna vez como yo tendria que perdonarlo, aunque lo que si sé es que qué mas da que yo lo perdone o no.
Detrás de las palabras de cada bestia hay una mentira, detrás de las mentiras de cada bestia hay una verdad, y detrás de esa verdad tiene que haber una bestia interior distinta de la que se ve, más o menos distinta.
Que otros descubran la bestia que hay en mi que yo intentaré descubrir la bestia de los demás.

19 octubre 2005

dos sudokus

He conseguido esta tarde por primera vez hacer dos sudokus. No había conseguido terminar ninguno y hoy he conseguido dos. Son de los fáciles, pero los he hecho. Cualquier día me convierto en un especialista.

¿qué nos pasa?

Quiero, quiero, quiero... Tú no quieres nada.
Es lo que le pasa a mucha gente ¿o sólo me lo parece?
En ocasiones nos vemos en la necesidad de pedir algo a alguien y parece que no lo pensamos mucho. Después de pedirlo con ansia en muchas ocasiones, resulta que no lo necesitamos tanto, o que no lo queremos como nos lo ofrecen, o preferimos encontrarlo en otro sitio en ese momento. No sabemos muy bien lo que queremos.
Odiamos nuestra soledad y buscamos compañia donde podemos y cuando nos la ofrecen no nos gusta, o nos molesta. Y no sólo eso sino que no sabemos rechazarla como debemos y nos comportamos de la manera más grosera. Podemos encontrarnos con alguien que nos niegue el saludo, alguien que prefiera rechazarnos por teléfono después de exigir con fruición nuestra presencia,
Desconozco si lo hacemos sin darnos cuenta o tenemos consciencia de ello en todo momento y lo hacemos con toda la mala leche del mundo. ¿Somos cobardes? ¿Inconscientes? ¿Impresentables?
No sabemos lo que queremos. ¿O...?

18 octubre 2005

no disponible

A veces no sirve decir las cosas: por mucho que avises de donde vas a llegar no te creen y cuando llegas dicen ¿ya? Otras veces te ofrecen la bandeja llena y luego resulta que no puedes comerte lo que hay. No sé si ambas cosas son la misma, pero cuando me ponen la miel en los labios y me la retiran no me gusta.
Es como cuando veo a mis amigos conectados en el msn con la señal de no disponible. No sé por que entran si no pueden atenderte. O también como cuando te avisan para salir cuando no tienes ganas y cuando es la hora de salir y ya estas preparado te vuelven a avisar porque no les apetece. Es como cuando te calientan y no te rematan.
Pero también se puede utilizar como técnica para poner de los nervios al personal y sacarlo de sus casillas. Conmigo hay quien lo consigue. Y yo tendría que pensar si lo he hecho alguna vez. Pero no me parece que sea mi estilo. Es cosa de otros.

17 octubre 2005

hoy no me puedo levantar

Un fin de semana programado para ver un musical. El musical casi ocupa todo el fin de semana. Pero no es cierto: se sale a todas horas pero no da tiempo a nada, se duerme a todas horas pero no se para, se come con cualquier excusa pero no se sacia el hambre, se bebe y no es por sed, se baila sin parar, se canta sin cesar. Se canta durante casi cuatro horas.
Fueron cuatro horas cortas, música de ayer puesta al día, letras forzadas en un argumento, sensaciones de hace tiempo que fuerzan la nostalgia, nostalgia que fuerza las lágrimas, lágrimas que te llevan a la risa, risa por tiempos pasados que fueron peores pero que se recuerdan como buenos, no mejores.
¡Agotador!

13 octubre 2005

bestias modelos

Los demás también tienen su bestiario particular. Con mayor o menor fortuna o acierto, cada cual hace esto que tan poco me gusta a mi, pero que amplío gratamente cada cierto tiempo. Y lo que más me trae de cabeza es lo del acierto y la fortuna. Procuro tener el máximo de cada uno, pero reconozco que es complicado y que, según a quien, le parecerá o no; pero de momento aquí nadie se ha quejado -gracias al éxito de mi bitácora- y espero que nadie se queje -porque les va a dar igual-.
Pluis reconocía en la suya haberse pegado una tarde de bestiario con una amiga y en ese bestiario se incluía él como una de las bestias, principalmente él muy a su pesar. Y yo también me incluyo en este más a menudo de lo que yo quisiera, pero lo hago: soy una de las bestias más señaladas en la bitacora, y no siempre me señalo directamente.
Otros no reconocen su bestialidad ni por asomo. La prensa hace su propio bestiario y hablando de los últimos desfiles de París puntualizan y señalan como lo más destacado que los modelos fueran enanos, viejos y prostitutas. ¡Toma bestiario! Los enanos resultarán evidentes; los viejos seguramente también aunque algunos se conserven estupendamente, y en algunos casos, mejor que los jovenes; y las protitutas... ¿eran todas mujeres? ¿eran todas prostitutas? ¿por qué sabían que eran prostitutas? ¿a los que desfilan en pasarelas de moda no se les llama modelos? La prensa siempre modélica a la hora de clasificar en su bestiario diario.

06 octubre 2005

super-sí

Llamada para salir a cenar y tomar algo con antiguos compañeros y, entre ellos, una inesperada comensal que ve coches en la puerta y decide pasar aunque teme no conocer a nadie. Nos conoce a todos, pero parece que no me reconociera. Le cuesta mirarme a los ojos, le cuesta saludar. Por fín reconoce que me conoce y me saluda, pregunta por la salud, se hace desconocedora de datos que indirectamente le he hecho llegar. Está desconocida: ha pasado de ser la que más estudia, la que mejor trabaja, la que tiene un marido más estupendo, la que tiene una casa estupenda, la que está felizmente casada, la que va a aprobar las oposiciones rapidamente, la que acude a la mejor academia, la que tiene la mejor vacante del instituto, la que tiene el mejor horario, la que tiene más contactos en el pueblo, la que... para convertirse en una mujer feliz que cínicamente oculta el fracaso que llevamos todos por no ser quien quiere ser.
Unos se conforman mientras buscan más, otros se conforman simplemente, otros no se resignan al adocenamiento, otros ocultan el fracaso en un éxito de fachada, otros triunfan, otros...
Super-sí se reía de los que salíamos a tomar copas tres meses antes de examinarnos de la oposición, un día cualquiera durante la semana. LE hacía gracia que vivieramos en pequeños apartamentos alquilados en los que los muebles no eran de Ikea y a los que les faltaba la sartén, o el colador, o el sacacorchos. Se felicitaba de haber decidido casarse aun a riesgo de tener que separarse cuando en junio aprobara la oposición. Y al final suspendió, como casi todos, y tuvo que tragarse su orgullo como ahora se traga su cinismo.

03 octubre 2005

el buen entendedor

"Bueno, que yo bien, gracias..." Mensaje criptico donde los haya que podría haber sido de cualquiera que se viera en un error: el de marcar el número equivocado para enviar el mensaje. Pero viendo el remite y aplicándolo al contexto que nos ocupa al remitente y a mi parece cobrar sentido.
Primero me hace gracia: compruebo con él que he vencido en una lucha virtual que se dirimía en el sistema de mensajería corta y de telefonía móvil. Después me indigna: evidentemente no he vencido en ninguna lucha porque el remitente no se ha enterado de nada, o no se da por aludido. Yo a lo mío, no pienso doblegar porque considero que me deben una explicación o una disculpa o un gesto más claro que un simple sms.
Otra llamada de remitente desconocido esta vez a quien no le hacen falta muchas palabras para darse cuenta de que sus requerimientos no serán satisfechos. Parece mentira que este no me conozca y el otro sí.