29 junio 2006

evaluación

Hay que revisarse de vez en cuando. No lo he hecho por esto, pero lo he hecho y una vez hecho me he dado cuenta de ello: es necesario revisarse. Anteriormente había repasado la bitácora, pero parece que no le había prestado atención, o que mi atención debía estar en otro sitio, porque hoy la he releído en apenas media hora o tres cuartos -no he calculado pero se me ha pasado el tiempo volando-, he repasado algunos comentarios, he descubierto algunos que no estaban y he respondido... pero hay que seguir revisándose.
La bitácora se ha ido construyendo a través del tiempo y aunque el título apuntaba a una clasificación de bestias, no sólo se ha detenido en estas cuestiones.
Ha repasado las vivencias de algunas bestias y los caminos que han recorrido. Entre esas bestias el propio Fisiologus que, para no querer hablar de él, no ha parado. Ha dejado pasar y ha obviado los comentarios de algunos visitantes que debieron de llegar en un momento poco propicio para lo que luego sí ha tenido lugar: ha aceptado incluso el debate entre los visitantes, cuando no era objetivo de la bitácora.
Ha hecho también la prueba del éxito y ha fracasado en su objetivo: el objetivo era comprobar que Fisiologus tenía razón, pero se ha equivocado. Fisiologus creía ser un desconocido pero, aunque afortunadamente lejos del éxito de otras bitácoras, ha descubierto algunos seguidores a los que se les agradece su visita, se les reconoce también el miedo y la vergüenza -y no lo digo por Él, que no tiene culpa de nada, y no puede leerme-, y a los que se les pide discreción para poder continuar en la línea que se pretendía y que se ha perdido.
Sí, no me gusta el rumbo que ha tomado la bitácora. Por eso esta revisión. Aunque con la revisión Fisiologus ha descubierto que a veces hace las cosas mejor de lo que cree. ¡Perdón!
He pensado en evitar los comentarios de estos pocos lectores, pero me he visto como censor así que no lo haré. Lo que sí haré será evitar, en la medida de lo posible, responder a ellos y no participar en el debate, aunque dejaré espacio para el debate si queréis.
Diría también que me gustaría centrarme en la creación del neobestiario, pero como se me han pasado más ideas por la cabeza y no me parecen descabelladas, dejaré que la bitácora siga evolucionando como quiera. Si surgen novedades las veréis y si no también lo veréis. Habrá que esperar.
Si se me olvida algo ya lo comentaré.
En cualquier caso no me pondré nota y me prepararé para septiembre por si hubiera que recuperar.

27 junio 2006

tolerancia

Lo de tolerar al otro ya depende de las ganas de hacerlo. X lo propone en su comentario y el Sr_Skyzos apoya la moción. Yo soy más partidario de practicar la hipocresía descarada por pura diversión y cuando me aburro optar por la indiferencia, que no sé si será prima hermana de la intolerancia.
Ya han pasado muchas bestias por aquí -aun quedan otras que no sé cuando pasarán-, y llevo mucho tiempo pensando que algo de culpa tendrán en haber permitido que me convirtiera en ese hipócrita, cínico, ¿intolerante?, pero, aunque no la tengan, no puedo evitar ver en ellas a esas bestias que X o el Sr Skyzos toleran sin soportar.
Y no muevo un dedo por ellas salvo cuando ellas mismas me piden que lo mueva. Ya sé: parece absurdo y puede que lo sea. Esas bestias de las que hablo han sido en algún momento, y son en la mayoría de los casos, bestias amigas, y no puedo romper el vínculo de golpe, no sé hacerlo. Cuando digo que no muevo un dedo por ellas me refiero a no tomar la iniciativa para nada, pero si ellas la toman suelo responder de mejor o peor grado. Y es aquí donde aparece la hipocresía o el cinismo, pero no sé si la intolerancia. Esta es la palabra que no me gusta.

26 junio 2006

compañeros

La hipocresía lleva a algunas bestias a improvisar un compañerismo que disgusta a otras bestias, pero que supongo que practicarán alguna vez: espero no ser yo solo quien lo practica. Boris Izaguirre también lo practica, y así lo dijo el otro día en su programa, se reconoció gran hipócrita.
El escritor hablaba de la relación con sus compañeros de profesión y los avisaba de su capacidad para fingir sentimientos distintos de los reales. Es habitual y normal que entre todas las bestias haya algunas, varias, muchas que no despierten en otra bestia los mismos sentimientos que los demás. Inevitablemente compañeros, pero nunca obligatoriamente amigos.
Y en ese inevitablemente compañeros entra todo lo que se nos ocurra. Compruebo estos días esto que digo y me lo comentan muchos compañeros, quizás con cierto cinismo, quizás con hipocresía, puede ser que con ironía, pero siempre con mucha razón: yo también lo compruebo, lo sufro y lo practico de manera que muchos de mis compañeros reciben mi saludo todas las mañanas, mi sonrisa simpática y mi interés por su salud.
Para muestra de esto: cuatro compañeros viajando a la misma ciudad, a la misma hora, por la misma razón en cuatro coches distintos; invitaciones que se aceptan de buen grado y en el último momento se desestiman con ridículas excusas; extremada preocupación fingida con desinterés... ¿Quién da más?

21 junio 2006

la hipocresía de la bestia

Escucho tantas veces la palabrita que no me fio de nadie cuando la utiliza. Tan poco me fío que yo no suelo utilizarla demasiado para no pecar. Pero tengo que reconocer que tampoco conozco su significado por la sobreutilización a la que se somete la palabrita.

hipocresía.
1. f. Fingimiento de cualidades o sentimientos contrarios a los que verdaderamente se tienen o experimentan.
Y si nos ponemos así... ¿no seremos todos un poco hipócritas? Me viene a la mente aquello de que somos lo que queremos mostrar, lo que ven los demas, y lo que realmente somos. Puede ocurrir que lo que ven los demás no sea lo que realmente somos: ¿son hipócritas los que miran?. Puede ocurrir que lo que mostramos no sea lo que realmente somos: somos hipócritas los que mostramos.
No confíe nadie en lo que ve. Y cuando lo vea tenga cuidadado con la lectura que hace. Seguramente sea esto lo que haya que hacer.

19 junio 2006

competición bestial

Como siempre pierdo no me gusta competir. Quizás esta sea la causa de llevar todo el año buscando excusas para no estudiar. Entre excusa y excusa he estado a punto de meterme en otra competición, pero tengo un sexto sentido para esto y en cuanto he detectado competencia me he retirado.
Siempre son otros los que se llevan el gato al agua. Y quizás sea porque no compito. A las demás bestias les gustan los ganadores y yo no lo soy. No me considero perdedor porque no entro en la lucha, pero parece claro que las demás bestias me verán como tal.
Mi retirada de la competición no hace sino mejorar las espectativas de los demás competidores. Esto quiere decir que tampoco hago nada por que se acabe la competición: la competición continúa. Pero tampoco es mi intención que acabe. Quien quiera competir que lo haga.
Me aburren las competiciones. Suerte a todos.

14 junio 2006

si fuera...

un mes: diciembre
un día de la semana: viernes
un momento del día: el mediodía
un planeta: me quedaría con una estrella
un animal: una tortuga
un mueble: el sofá
una bebida: vino
un instrumento musical: la batería
una fruta: higos
una canción: ¡Cómo hemos cambiado! de Presuntos Implicados
una materia: un cuerpo
una parte del cuerpo: los pies
un objeto: un abanico
una comida: arroz con verduras
un personaje animado: mazinger-z
un número: el 6
un coche: el mío, un seat altea rojo
una ciudad: Salamanca
un mar: Mediterráneo
un idioma: Castellano
una flor: magnolia
un color: azul
un verbo: andar
una estación del año: el otoño
una prenda de vestir: los zapatos
un libro: el hereje, de Delibes
un país: el de Nunca Jamás
un lugar: ...en el mundo
un deporte: el tenis
una película: la verdadera naturaleza del amor de Denys Arcand
una marca: Volkswagen
una serie: Doctor en Alaska
una página web: http://selvadeesmelle.blogspot.com/
un sabor: dulce
un signo del zodiaco: leo
un perfume: fresco y masculino

Lo encontré en la bitácora que aparece enlazada. Contádmelo vosotros también si os apetece.

13 junio 2006

el peso de las circunstancias

EL AEROGUATUTÚ http://skyzosenlared.blogspot.com/ tiene mucha razón, y como ya lo dice él y lo dice tan bien ...¿para qué lo voy a repetir? Pero como le he dicho a él yo lo pondría en primera persona: me considero tan culpable como los demás, si es que alguno somos culpables de tener una circunstancias vitales.
Pero que cada uno se responsabilice de las suyas: quien tenga hijos que los asuma, quien tenga pareja que la asuma, quien no la tenga que lo asuma -o que la busque-, quien tenga familia que la soporte... y sobre todo que no se interponga entre los demás.
Lo digo porque he llegado a pensar que el problema es que a las circunstancias les damos demasiado peso.

09 junio 2006

Él está aquí

Ahora Él ya sabe que ando por aquí. No sé si me espiará mucho o no. Yo espero que no, para no tener que cortarme demasiado. Pero no me cortaré; si acaso que se corte Él.

08 junio 2006

bestia conflictiva

La norma dice en este punto que la bestia debe actuar con cierta cordura y la bestia, que razona y conoce el mundo que la norma regula, acata y respeta la norma: lo hace sin ningún problema. Pero no todas las bestias acatan de la misma manera y comienza el conflicto.
No siempre la norma le pide a la bestia que actúe con cordura: muchas veces la norma convierte a la bestia en marioneta idiota. En esos casos la bestia debería reaccionar y oponerse a la norma con argumentos: los mismos que hacen que la bestia acate otras normas. La razón y el conocimiento del terreno en el que la bestia se mueve aportará los argumentos. Pero no todas las bestias dominan la razón ni conocen el terreno. Eso parece. Vuelve el conflicto.

06 junio 2006

debate

Continúa el debate entre la vida cómoda y la búsqueda de refuerzos para paliar las ausencias. Pronto llegarán nuevos tiempos que obligarán a nuevos esfuerzos.

04 junio 2006

la bestia burlona

Nos gusta burlarnos de las circunstancias ajenas. Igualmente lo hacemos aunque conozcamos bien esas circunstancias. Y lo hacemos independientemente de si conocemos bien o no a quien se encuentra en ellas. Tomamos distancia de esas circunstancias en cuanto las salvamos y supongo que la distancia la hacemos mayor si son ingratas de revivir personalmente, pero no tenemos reparo en hacerselas revivir al otro -al fin y al cabo no las revive, las vive, está sumido en ellas-.
Tenemos bastante facilidad para distanciarnos de lo que no nos gusta, olvidarnos de lo que nos retrae, o de lo que nos tensa.
¿Qué beneficio obtiene la bestia emparejada recordándole su situación a otra que no lo está ? ¿Qué placer se extrae del regodeo en la desgracia ajena? ¿Hay alguna bestia capaz de aceptar todas las burlas de las demás bestias? ¿Es divertido hacer gracietas con la situación laboral de alguna bestia parada o explotada?... Hay muchos chistes a estos respectos y otros más.
A veces resulta gracioso, cuando es uno mismo quien se rie de ello.

02 junio 2006

el caleidoscopio de la bestia

Compruebo a menudo cómo es el trato entre las bestias. Observo cómo se analizan unas a otras. Mido las distancias que se guardan entre ellas según sus comprobaciones, observaciones y medidas. Evalúo y puntúo a las bestias -deformación profesional será- en función de todo esto, y seguramente más cosas de las que no me doy cuenta -soy observador, pero no tanto-.
Sé que formo parte de ese juego porque algunas bestias deciden comunicarse conmigo finalmente, y comparten el resultado de esas observaciones de las que he sido objeto por su parte. Compruebo la distancia que nos separa en esas observaciones. Ya sé que no es la misma imagen la que tienen de nosotros, la que nostramos y la que somos. Ya lo hemos compartido muchas veces. Quizás sea el tópico del término medio, del no aceptar que una se equivoca y otra acierta para darle así la razón a las dos. Pero esto cuando solo hay dos versiones: la de la bestia que mira y la de la que es mirada. Pero cuando son varias bestias las que miran... Fuera tópico: no puede haber término medio.
Es difícil tratar a las bestias desde el punto de vista que uno tiene de ellas. Difícil es también acertar con el trato si queremos hacerlo desde la imagen que la bestia quiere dar. La forma más complicada de tratarla será quizás la que requiere su imagen real, puesto que parece que nadie la ve fielmente. Si el trato a las demás bestias se hace según una misma, no parece la forma adecuada, y cuando se intenta la forma adecuada, se vuelve falsa a los ojos de las demás bestias...

01 junio 2006

las mismas bestias con otro pelaje

Llegar tarde es una mala costumbre que practican muchas bestias y que molesta mucho a otras tantas. Pero existe también la costumbre de organizar la vida a los demás según nuestras necesidades para luego no necesitarlas. Curioso, ¿verdad? Y más curioso aún es que sean las mismas bestias las que practican las dos costumbres a la vez.
Aunque la mayoría prefiere celebrar con una cena, se hace una comida para que puedan venir y luego no vienen. Aunque muchos prefieran salir de cañas, se sale de copas para que podamos juntarnos todos y luego siempre somos los mismos. Si buscas una fecha para celebrar algo con todos siempre hay alguien que pone más reparos para luego no asistir de ninguna de las maneras.
En el cole deberían enseñar mejor a hacer lo que a uno le da la gana cuando le da la gana. O quizás algunos no lo aprenden y otros sí. Pasa con todo.